Una de las cosas que más me gustan de The Band-y de Grand Funk Railroad- es que el batería cantaba,cosa que me parece el colmo de la destreza.
Encima,el tipo lo hacía muy bien-si no lo han hecho veanse inmediatamente The Last Waltz,almas de cántaro-amén de darle con garbo a la mandolina.
Cuando The Band se disolvió,allá por el 76,El amigo Levon Helm sacó este su primer disco en solitario,y al igual que Rick Danko,recurrió a los colegas,o sea que es más de lo mismo,o sea, que sigue siendo una música inmarcesible y dificilmente superable.
Hala,estamos de vuelta.
American Son.
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